La rinomanometría es una técnica de exploración clínica que registra las variaciones de flujo y de presión que se producen en el interior de las fosas nasales durante las distintas fases de la respiración, lo que permite valorar de manera objetiva y cuantitativa el grado de permeabilidad de las mismas.

​Según los aparatos utilizados y su mecanismo de funcionamiento, existen varios tipos de rinomanometría. La más habitual en la práctica clínica, y de la que disponemos en nuestra consulta, es la rinomanometría anterior activa informatizada.

​Es una prueba no invasiva y  fácil de realizar, cuyas principales aportaciones o ventajas son:

  • Permite valorar adecuadamente la relación existente entre las deformaciones anatómicas nasales, como las desviaciones de tabique, y su repercusión funcional, evitando sobrestimarlas o infravalorarlas.
  • Permite diferenciar las causas nasales de las no nasales en los casos de insuficiencia respiratoria.
  • Evita la subjetividad del paciente a la hora de realizar el diagnóstico.
  • Facilita la valoración de la eficiencia funcional de los tratamientos médicos o quirúrgicos.
  • Permite estudiar la influencia de determinados factores (vasoconstrictores, alergenos, etc) sobre la función respiratoria nasal, mediante la determinación de ésta antes y después de los test de provocación.